Amortiguadores
Son los elementos mecánicos del coche que se reparten por igual las funciones de contribuir a la seguridad en la carretera manteniendo las ruedas en permanente contacto con el suelo y reducir las oscilaciones del vehículo, proporcionando la comodidad y confort a sus ocupantes.
Están situados entre el eje de las ruedas y el chasis y hacen que el vehículo siga una trayectoria uniforme, influyendo en la frenada, control de dirección y una conducción estable y equilibrada sobre cualquier superficie.
Los amortiguadores se deterioran en mayor o menor rapidez en función del uso del vehículo, del estado de las carreteras por donde circule, el estilo de conducción y la carga habitual que soportan.
Unos amortiguadores en mal estado pueden provocar graves problemas de seguridad en forma de:
- Poca adherencia en las curvas y pérdida del control del vehículo - Gran sensibilidad del vehículo al viento lateral - Desgaste irregular de los neumáticos - Alargamiento de las distancias de frenado - Oscilaciones peligrosas de la carroceria
Al contrario de otros elementos de desgaste del vehículo, aquí no hay ningún testigo que nos alerte de un mal funcionamiento. Existe la tendencia de acostumbrarse a conducir con los amortiguadores en mal estado, y de forma involuntaria se compensa la ineficacia de los amortiguadores modificando la forma de conducción. A pesar de ello, si nota que:
- El vehículo tiene tendencia a hundir la parte delantera en las frenadas - En las curvas el coche tiene tendencia a desplazarse hacia el exterior - Los otros usuarios hacen señal de deslumbramiento - Uno de los amortiguadores tiene fugas de aceite
es aconsejable la sustitución de los amortiguadores.
Aunque es recomendable cambiar los cuatro amortiguadoes al mismo tiempo, en procederemos a realizar un diagnóstico preciso del estado y efectividad de los amortiguadores y cuáles son necesarios sustituir.
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